Nací en Lima, Perú. Desde la infancia siempre sentí la necesidad de buscar explicaciones alternativas para todo lo que mis padres y maestros me enseñaban y esperaban que aceptara sin cuestionar-- enseñanzas sobre diversos aspectos de la vida familiar, las relaciones, los principios, los valores y, por qué no, la religión también ... .

Desde que era un niño pequeño, cuestioné todas las estructuras sociales y religiosas que intentaban encerrarme o encasillarme, tal vez porque inconscientemente sabía que había otras verdades y explicaciones a las que no teníamos acceso.

Durante mi adolescencia y juventud, sentí que era un espectador de las relaciones interpersonales de todos los que me rodeaban. Disfruté mucho analizando a los seres humanos y viendo la complejidad con la que sus vidas se desarrollaban cíclicamente, estableciendo una relación de causa y efecto con quienes formaban parte de su entorno. Sentí la necesidad de encontrar la causa de los problema y delinear varios caminos alternativos que pudieron haberse tomado para evitar tal situación.

En los años siguientes desarrollé un interés especial en las computadoras y así es como me convertí en ingeniero de sistemas, especializado en redes de cómputo. Con gran placer descubrí que trabajar con sistemas se me hacía relativamente fácil porque, una vez más, me enfrentaba con mi fascinación por analizar, aunque en esta situación, era con computadoras, comunicaciones, rutas alternativas, reglas y protocolos, encontrando así el solución a cada problema.

Siempre me han atraído los temas metafísicos, intereses que se potenciaron al escuchar a mi padre hablar sobre estos temas y comentar sobre los libros que había leído. Así es como escuché por primera vez sobre el Dr. Brian Weiss y su libro "Muchas Vidas Muchos Maestros", en el que explica el concepto de vidas pasadas y la reencarnación. Aunque no pude leerlo en ese momento, el concepto siempre corría por mi mente.

No fue sino hasta veinte años más tarde, después de la muerte de la madre de mi esposa, que el libro "Muchas Vidas Muchos Maestros" aterrizó en mis manos nuevamente. Esta vez, no sólo leí el libro, sino también otros del mismo autor, que me fascinanaron y cautivaron por completo.

Días más tarde, mientras buscaba videos de regresión en Internet, encontré sesiones regresivas de hipnosis grabadas por el Sr. Aurelio Mejía, un hipnoterapeuta colombiano. A través de estos videos, pude ver en la práctica todo lo que el Dr. Weiss mencionaba en sus libros.

Algún tiempo después, en la búsqueda de hipnosis regresiva, me encontré con el sitio web de Dolores Cannon, donde no sólo encontré información valiosa, sino también la posibilidad de asistir a sus clases y aprender Terapia de hipnosis curativa cuántica. Casi un año más tarde tendría el honor de aprender la Técnica de Hipnosis Introspecvita de Aurelio Mejía durante su estadía en Charlotte y recibir la certificación de Hipnosis Clínica de sus propias manos.

He tenido el honor de presenciar de primera mano cómo las vidas de muchas personas han cambiado profundamente durante y después de las sesiones de hipnosis. Una vez más, la vida me lleva a analizar las comunicaciones, las interrelaciones y las reglas y protocolos de los seres humanos para encontrar la causa raíz de sus problemas afectivos, emocionales, físicos y existenciales. La diferencia es que esta vez las situaciones que se originaron en vidas pasadas podían estar afectando a la actual.

"No hay coincidencias en la vida, cada uno de nosotros ha elegido las lecciones que debemos aprender en la vida. Escogimos a nuestros padres, nuestro entorno y aquellos con quienes interactuaremos en nuestro viaje. El planeta Tierra es nuestro salón de clases. Asistimos con los recuerdos. de nuestras vidas pasadas borradas. Nuestro objetivo es recordar quiénes somos y para qué venimos (nuestra misión) y lograr lo que llamamos "despertar espiritual". Y una vez que lo logramos, debemos ayudar a otros a despertar también ".

"No hay casualidades en la vida, cada uno de nosotros ha elegido las lecciones que debe aprender en la vida. Elegimos a nuestros padres, a nuestro entorno y a las personas con las que nos relacionamos en nuestro camino. El planeta Tierra es nuestra aula. Asistimos con los recuerdos de nuestras vidas pasadas borrados. Nuestro objetivo es recordar quiénes somos y para qué hemos venido (nuestra misión) y lograr lo que llamamos "despertar espiritual". Y una vez que lo logremos debemos ayudar a otros a despertar también".